pués de 33 días sin registrarse homicidios en la capital santandereana, la racha positiva acabó el pasado jueves en la noche, con la muerte de Carlos Mario Villamizar Cáceres, de 29 años.
Este hombre, de acuerdo con la Policía, caminaba por la carrera 28 con calle 55 del barrio Los Colorados, sector de La Bonanza, norte de la ciudad, en compañía de Anderson Vásquez Sepúlveda, cuando sobre las 8:30 de la noche fueron abordados por dos hombres.
Sin mediar palabra, estos sujetos comenzaron a disparar. Villamizar Cáceres fue quien llevó la peor parte, recibió dos disparos en la cabeza que a los pocos minutos acabaron con su vida. Los agresores huyeron.
Entre tanto, los mismos habitantes de la zona trasladaron en un vehículo particular al Hospital Local del Norte al otro individuo, donde fue estabilizado y remitido al Hospital Universitario de Santander, HUS.
A pesar de que recibió un disparo en la espalda, ayer Vásquez Sepúlveda estaba estable, según informaron las autoridades.
Detención domiciliaria
y prontuario
De acuerdo con el brigadier general Manuel Antonio Vásquez Prada, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, el hombre de 29 años tenía una medida de detención domiciliaria en el barrio La Inmaculada.
“La víctima se encontraba fuera del lugar donde debería estar purgando una pena de detención domiciliaria, por hurto de motocicletas. Con anterioridad a este hecho, se había capturado en dos oportunidades por el delito de fuga de presos”, explicó el uniformado.
La Policía añadió que el occiso tenía un amplio prontuario delincuencial, más exactamente siete anotaciones por diversos delitos.
“Estaba inmerso en otro proceso investigativo, en el que en los próximos días se iba a emitir una nueva orden de captura también por hurto de motocicleta”, agregó Vásquez.
Sobre los móviles del asesinato, el Brigadier General informó que por ahora son materia de investigación.
Es de recalcar que en el sitio de los hechos algunos testigos informaron que “los homicidas son de la ‘banda del dedo’, eso es como por ajuste de cuentas, por hurtos”.
Habla la familia
Ayer en la tarde, los allegados del occiso, mientras realizaban los trámites para reclamar el cadáver en Medicina Legal, informaron que no eran conocedores de amenazas o problemas de su pariente.
“Él salió con tres amigos del barrio, luego supimos la noticia que lo había matado. Hasta la presente no sabemos nada, no sé si tenía enemigos”, explicó Mario Villamizar Rodríguez, padre de la víctima.
Del fallecido se conoció que trabajaba en construcción y tenía un hijo de siete años.
“Tenía casa por cárcel, salió y no sé qué pasaría. Esperamos las autoridades puedan esclarecer la muerte”, concluyó el progenitor.
76 asesinatos
Con la muerte de Carlos Mario Villamizar Cáceres, el número de asesinatos en Bucaramanga se elevó a 76 víctimas este año. El crimen rompió una racha de 33 días sin asesinatos en la capital santandereana.
Antes de este ataque, el último hecho de sangre había sucedido el pasado 27 de octubre, cuando Édgar Elías Pabón Gutiérrez fue atacado a bala en el barrio Girardot por dos sicarios, uno de ellos venezolano, quienes se desplazaban en una moto. Ambos fueron capturados y enviados a prisión.
fuente/vanguardialiberal.com
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